El Hambre y los niños

En relación con la noticia de "Cada año 10 millones de niños mueren en el mundo antes de llegar a los cinco años de edad", aquí os dejo un vídeo titulado "el hambre y los niños". En él veréis imágenes de gran crudeza pero que reflejan la situación que viven más de diez millones de niños de todo el mundo en pleno siglo XXI.

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Un llamamiento en el Día de los Derechos Humanos

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Con motivo del Día Mundial de los Derechos Humanos, numerosas ONGs han realizado campañas para recordar cuál es nuestra posición en el mundo como seres humanos.Por ello, resaltamos el llamamiento que desde hace unas semanas viene realizando Amnistía Internacional. El documento es mucho más amplio- y tan sólo he destacado el apartado de la pobreza en el mundo.

Los derechos humanos son indivisibles. La negación de los derechos económicos, sociales y culturales va unida a la negación de los derechos civiles y políticos. Sólo desde esta perspectiva se puede hacer frente a la pobreza.

En el 60 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, Amnistía Internacional recuerda que solo mediante el respeto de los Derechos Humanos se hará realidad la dignidad humana universal.

La pobreza no es una fatalidad ni un fenómeno natural, es el resultado de decisiones que toman gobiernos, empresas y otros actores, que obligan a millones de personas a vivir sin agua potable, atención médica, vivienda o seguridad. Si a las personas pobres se les niega un foro para exigir sus derechos, se está agravando su situación. A su vez, la pobreza conduce a nuevas violaciones y abusos de derechos humanos.

● En el largo conflicto interno que vive Colombia, el Estado no protege a la población civil. Los campesinos y los indígenas son los más castigados porque viven en tierras que se disputan la guerrilla y los paramilitares. En Irak, la población civil sufre por la falta de alimentos, agua, servicios sanitarios, educación, y hay 4,7 millones de iraquíes desplazados dentro y fuera del país, muchos de ellos con dificultades para sobrevivir.

● Las leyes discriminatorias de género, etnia, religión u opinión que existen en muchos países dificultan, si no impiden, el acceso a los derechos de colectivos muy vulnerables, incrementando sus niveles de pobreza. Amnistía Internacional ha documentado casos de discriminación, manipulación política en la distribución de alimentos y obstrucción de la asistencia humanitaria en países como Corea del Norte, Myanmar, Somalia, Sudán, Territorios Palestinos Ocupados y Zimbabue.

● En ciudades de todo el mundo familias enteras son desalojadas para dar cabida a proyectos urbanísticos, como en Angola, donde no han recibido ni indemnizaciones ni alojamiento alternativo. En el ámbito rural, los conflictos de tierras y las usurpaciones ilegales, a menudo llevadas a cabo por empresas nacionales y multinacionales, son un foco constante de violaciones de derechos humanos que afectan sobre todo, a las comunidades indígenas y campesinas..

● Hay una relación directamente proporcional entre niveles de pobreza y el grado de violencia sufrida por una comunidad. También el nivel de impunidad es mayor cuanto más pobres son las víctimas de la violencia, como ocurre en Brasil, Jamaica o Guatemala.


● La pobreza es una barrera para el acceso a la justicia, y la falta de acceso a la justicia perpetúa la pobreza de quienes ven sus derechos desprotegidos.

● También en el caso de la pandemia del VIH/SIDA, las comunidades pobres tienen más dificultades para acceder a los medicamentos.

● En muchos países los Gobiernos no protegen a los defensores de derechos económicos, sociales y culturales del hostigamiento y las amenazas que sufren por su trabajo, y a veces son los propios agentes estatales quienes los persiguen.

La lactancia materna, un arma eficaz contra el SIDA

martes, 9 de diciembre de 2008


En Suazilandia, la mitad de las mujeres en edad reproductiva están infectadas por el virus, lo que disparara el riesgo de tener hijos seropositivos, un drama que podría frenarse a través de una medicina tan sencilla como la lactancia materna exclusiva.

En Suazilandia, un tercio de la población es seropositiva. A esta cifra esperpéntica se suma otra más desoladora: la mitad de las mujeres en edad reproductiva están infectadas por el VIH/SIDA. Se trata de mujeres que en la mayor parte de los casos contagiarán a sus hijos, durante el embarazo (7%), el parto (15%) o el período de lactancia (15%). En este último caso el riesgo de contagio podría reducirse a la mitad si los niños se alimentasen únicamente de leche materna durante al menos seis meses. En 2009, Acción contra el Hambre trabajará con más de 2.600 madres suazis en la promoción de la lactancia exclusiva.


“Está demostrado que aunque a través de la leche también se transmite el virus, el riesgo de contagio es mucho menor que si el niño toma otros alimentos al mismo tiempo: sabemos que la mezcla provoca una inflamación estomacal que hace que el virus del SIDA pase al corriente sanguíneo más fácilmente” explica Susan Thurstans, responsable de VIH/SIDA de Acción contra el Hambre.


Tradicionalmente la madre suazi daba de mamar a su hijo hasta los dos años de vida, un hábito que se ha perdido con la propagación del virus ya que las madres temen contagiar a sus hijos a través de la leche. Con las nuevas prácticas, las enfermeras no solamente les indican las ventajas de la lactancia materna sino que les forman en la mejor dieta para su bebé una vez que empiecen a introducir otros alimentos, como la asimilación paulatina de proteínas o la importancia del consumo de verduras y frutas.


En este sentido, Acción contra el Hambre prefiere trabajar de forma indirecta, formando a más 1.500 médicos, enfermeras, líderes comunitarios y otros profesionales nacionales en el tratamiento de la desnutrición en niños seropositivos así como en la prevención del virus entre madres e hijos a través de nuevas prácticas nutricionales. “Nunca antes ha estado tan demostrada la relación entre la desnutrición y el sida: una sencilla intervención en nutrición puede reducir drásticamente la transmisión de la enfermedad” comenta Susan. Y es que, por ejemplo, un niño seropositivo que además padezca desnutrición metaboliza mucho peor los antirretrovirales, mientras que una madre embarazada con SIDA necesita casi un 20% más de aporte nutricional que otra que esté sana.


Fuente: Acción Contra el Hambre


Nuevo brote de cólera en Zimbabue


Zimbabue está experimentando el peor brote de cólera de los últimos años. Más de 500 personas han perdido la vida, tras el colapso del suministro de agua y de la sanidad. Más de 12.000 casos de cólera han sido detectados.

“Este brote está sobrepasando nuestra respuesta”, afirma la oficial de comunicación de UNICEF en Zimbabue, Tsitsi Singizi. “Se está volviendo endémico. Nueve de las 10 provincias del país han informado de casos de cólera”.

Colapso en las infraestructuras

Los zimbabuenses están padeciendo varios años de inflación insostenible, escasez de alimentos y rápido deterioro de los servicios sociales, especialmente en los sectores de educación y salud. Ahora el país se enfrenta al colapso total de la infraestructura necesaria para tratar enfermedades como el cólera.

“Lo que ocurre principalmente es que los servicios municipales y las autoridades encargadas del suministro de agua ya no tienen capacidad para proporcionar agua potable y evitar la recolección de agua”, dice Singizi. “Al mismo tiempo, hay un colapso en los servicios de salud, lo que ha hecho imposible tratar el gran número de contagios”.

La respuesta de UNICEF en Zimbabue

UNICEF ha anunciado una respuesta de emergencia de 120 días para intensificar los esfuerzos de ayuda humanitaria para la infancia del país. A corto plazo, UNICEF incrementará el alcance de los servicios de salud, proporcionará suplementos nutricionales, impulsará la asistencia al agua potable en las escuelas.

Por el momento, UNICEF está enviando camiones con 360.000 litros de agua por día a Harare. UNICEF y sus aliados están distribuyendo también suministros esenciales, como pastillas de jabón, guantes de látex y pastillas potabilizadoras. Se han puesto en marcha campañas de educación pública para intentar prevenir la expansión de la enfermedad.

Atajar las principales causas

“Esto es un síntoma de que el sistema se ha colapsado”, indica Singizi. “Estamos haciendo un llamamiento a algunas contrapartes para intentar abordar los principales factores que llevan al estallido de una epidemia, en términos de un sistema de agua funcional o de un alcantarillado funcional”.

“Estamos en un diálogo constante con los gobiernos locales y con el Ministerio de Agua, para que proporcionen un solución sostenible para prevenir la recurrencia de brotes de cólera que parecen estar caracterizando ahora a Zimbabue”.

Fuente: Unicef

Un día entre quienes huyen del conflicto de República Democrática del Congo

martes, 2 de diciembre de 2008

Aquí os muestro un reportaje de Jaya Murthy, miembro de UNICEF en República Democrática del Congo. Tras haber sido testigo del rebrote de la violencia en el este del país y de sus consecuencias sobre miles de personas obligadas a huir, nos relata cómo es un día en el campamento de desplazados de Kibati

Por Jaya Murthy
Campamento de Kibati, República Democrática del Congo, 18 de noviembre de 2008 –
En las últimas semanas más de 100.000 personas han huido de sus hogares a causa del conflicto y la creciente inseguridad en el este de la República Democrática del Congo. Mientras escribo esto, 35.000 más están preparándose para huir. En los dos últimos meses y medio, cerca de 250.000 personas han dejado sus casas atrás. Más de un millón de personas en Kivu Norte (el 20% de la población de esta provincia) son ahora desplazados internos.

He pasado un día en el asentamiento para desplazados de Kibati, a 9 km. De Goma, la capital de la provincia. Más de 60.000 personas han llegado aquí desde que el conflicto se intensificó. Miles de ellos han tenido que huir varias veces. La huída se ha convertido en algo “normal” en sus vidas.

Vacunas para 13.000

Un niño es vacunado contra el sarampión en el campamento de Kibati, como parte de una acción de UNICEF para vacunar a 13.000 niños y niñas desplazados por el conflicto en el este de la República Democrática del Congo

Cuando llegamos a Kibati el 13 de noviembre vimos cientos, si no miles, de personas de camino al campamento. La mayoría eran desplazados. Saben que, si la seguridad lo permite, hoy recibirán asistencia básica.

UNICEF y sus aliados están llevando a cabo una campaña de emergencia de vacunación contra el sarampión y la polio para 13.000 niños. El sarampión es muy contagioso y se expande rápidamente en las aglomeraciones. Las vidas de cientos de niños y niñas están en peligro si la amenaza del sarampión no se contiene inmediatamente.
Además de las vacunaciones, se está administrando vitamina A, para mantener a los niños a salvo de infecciones respiratorias y otras enfermedades. Las enfermedades respiratorias son la segunda causa de mortalidad infantil en el país y pueden aumentar entre los niños desplazados que tienen que dormir al aire libre.

Agua potable, saneamiento e higiene

Camiones cisterna con agua potable están llegando al campamento. Esta es la única fuente de agua limpia accesible a la población desplazada. Enfermedades contagiosas relacionadas con la mala calidad del agua, como el cólera y la diarrea (la tercera causa de mortalidad infantil en el país) han aumentado en la zona en los últimos días.

Para aumentar la protección frente a estas enfermedades se están instalando cientos de letrinas. Las letrinas son esenciales para contener la contaminación por aguas fecales en áreas superpobladas como esta.

Además se está incentivando la promoción de una buena higiene. Tanto el cólera como la diarrea pueden frenarse si la gente sabe que lavarse las manos es fundamental para reducir el contagio. Equipos de especialistas recorren el campamento para aconsejar a la población sobre el agua potable, el uso de las letrinas y el lavado de manos.

Ayuda en salud y nutrición

En un almacén provisional de UNICEF en Kivu Norte, los suministro de emergencia están siendo distribuidos en 27.000 equipos familiares para cubrir las necesidades básicas de 135.000 desplazados.

Para reducir aún más las tasas de mortalidad, se han distribuido 15.000 equipos de supervivencia, con utensilios domésticos básicos y equipamiento de emergencia para refugios, como mantas, ropa, utensilios de cocina, bidones, jabón y mosquiteras para prevenir el paludismo (la primera causa de mortalidad infantil en el país).

En un centro de salud hay medicinas gratuitas. Cientos de niños y madres han recibido tratamiento para enfermedades y heridas. El personal de enfermería ha informado de casos de paludismo y otras enfermedades, con cada vez peores consecuencias para los niños desnutridos.

Las galletas energéticas que hace una semana se distribuyeron a más de 15.000 niños pueden haber ayudado a contener el aumento de los niveles de desnutrición. Incluso así, una reciente supervisión nutricional ha identificado a más de 100 niños gravemente desnutridos, que están recibiendo asistencia urgente.

Mientras, equipos especiales tratan de identificar a los niños que han sido separados de sus padres y sus familias. Más de 150 niños que están solos, muchos de apenas 2 años, has sido identificados en los tres días previos. Están siendo acogidos por familias mientras se busca a sus familiares y puedan reunirse con ellos tan pronto como sea posible.

La educación, interrumpida. Los niños, se apañan

Familias desplazadas cocinan en el exterior de sus refugios en el campamento de desplazados de Kibati.

En un edificio de madera, un grupo de líderes comunitarios, profesores, padres y personal de UNICEF están discutiendo sobre cómo habilitar un espacio para la enseñanza en las escuelas que ahora sirven de refugio a los desplazados y de campamento a los soldados. Si no se encuentra una solución, la educación continuará temporalmente interrumpida o inaccesible para cientos de niños.

A las puertas de una escuela, unos 20 niños y niñas cantan y bailan al ritmo de un tambor. Es una forma de terapia que les consuela. Otro niño estudia tranquilamente en un banco un poco más lejos. Otros juegan al fútbol con un montón de bolsas de plástico atadas.

Los niños están encontrando sus propios medios para afrontar la situación.

Supervivencia

Mientras estas intervenciones están teniendo lugar en el campamento, la línea de combate se encuentra tan solo a unos pocos kilómetros de distancia. Otra oportunidad de volver a escapar de la violencia se encuentra también cerca: para conseguir una mayor protección, la gente de aquí tendrá la oportunidad de ser realojada en los campos del otro lado de la ciudad de Goma.

Sin embargo, seguimos profundamente preocupados por las decenas de miles de personas que aún permanecen fuera del alcance de la ayuda de UNICEF, debido a la continua violencia. Tan pronto como aparezca la más pequeña posibilidad de acceso, UNICEF y sus aliados harán llegar estas intervenciones de emergencia ofrecidas en Kibati allá donde sean necesarias.

La supervivencia de miles de niños y mujeres inocentes depende de ello.